Aunque en 2017 Argentina creó un impuesto sobre apuestas online de un 2% y se habló de la posibilidad de recaudar mil millones de dólares, un año después el Estado ha recibido cero pesos por esa tasa. Sin embargo, las webs de apuestas no paran de crecer.
Las tarjetas de crédito y débito debían oficiar como agentes de retención y la intención era reducir el déficit fiscal y compensar parte de las deducciones creadas en diciembre de 2016 sobre el impuesto a las ganancias, informa el diario La Nación.
Sin embargo, un año después la oferta de apuestas por internet aumenta y, según La Nación, ni el Estado ni el sector tiene una estimación del volumen del negocio ni dónde van los dólares que estas actividades generan.
El impuesto tenía que desarrollarse en un reglamento que, sin embargo, no se ha realizado al chocar con la competencia provincial de regular y gravar el juego, así como por la dificultad de controlar las formas cambiantes de pago en internet, desde tarjetas a monederos electrónicos o transferencias bancarias.
Dado el aumento de los sitios de apuestas, las provincias argentinas se debaten entre considerar las apuestas juego clandestino al entender que su regulación aumenta la oferta o competir en el mercado con sus propias plataformas o licitaciones a terceros.
A favor de la regulación están quienes consideran que el juego online seguirá creciendo de todos modos y que el Estado debe intentar financiarse con esos recursos.
En estos momentos, el juego online en Argentina está regulado en las provincias de Misiones, San Luis, Tucumán, Neuquén, Río Negro, Chaco y Entre Ríos -solo apuestas para un tipo de quiniela-.
Misionbet, Jugadón y Pálpitos24 son sitios oficiales de las tres primeras provincias citadas. Neuquén y Río Negro habilitaron a sus casinos (Magic y Del Río) a iniciar apuestas online, mientras que Chaco pretende lanzar su propia web. Formosa lanzó Formoapuestas en 2006y la cerró en 2008.
En el pago, todas aceptan tarjetas prepago físicas y virtuales dentro de la provincia, algunas solo aceptan jugadores residentes en la provincia y otras a quienes estén en el distrito en el momento de apostar.
En el caso de Misionbet, fue cerrada el año pasado, pero ha sido reabierta este mes por decisión judicial y solo puede accederse a ella desde la misma provincia.
Por otra parte, casi todas estas páginas ofrecen juegos de casino pero no permiten apuestas deportivas, excepto Pálpitos (Tucumán), que ofrece partidos de todo el mundo y de las ligas argentinas, pero que ha sido denunciada por Lotería Nacional, la secretaría de Deportes y la Asociación de Fútbol Argentina, que valoró la posibilidad de lanzar su propia casa de apuestas.
