El Instituto Brasileño de Juego Responsable (IBJR), que agrupa a las principales empresas de apuestas deportivas de Brasil y del mundo, considera que la propuesta de la Confederación Nacional de la Industria (CNI) de crear la “CIDE-Bets”, con un impuesto del 15% sobre cada apuesta en el mercado regulado, es “sumamente perjudicial” para el país.
En opinión del IBJR, este impuesto “penalizaría a los jugadores que cumplen con la ley y beneficiaría directamente al mercado ilegal, que seguiría operando sin pagar nada. Como bien resume el sector: si apostar legalmente se encarece, los brasileños apostarán ilegalmente”.
Para el IBJR, el mercado ya “soporta” una de las cargas fiscales “más altas del mundo” para el sector del juego, un 12% sobre los Ingresos Generales del Estado (IGE), más el PIS/Cofins y el ISS. Esto eleva la carga total sobre el consumo a aproximadamente un 25%. Por tanto, indican, no se trata de ningún “beneficio fiscal”, sino de “una industria naciente que lucha por sobrevivir a la competencia desleal de quienes no pagan impuestos”.
Además, añaden que la propuesta de la CNI también se basa en “un grave error económico». Consideran la estimación de ingresos de R$ 8.500 millones “muy superior a la realidad, ya que estimulará aún más el mercado ilegal, que actualmente representa cerca de la mitad de las apuestas en el país”.
Añaden que las plataformas clandestinas “no recaudan impuestos y no comenzarán a hacerlo con el impuesto CIDE-Apuestas”. Es más, consideran que “el efecto sería el contrario: una reducción de la base impositiva y una mayor migración al mercado ilegal”.
Citando un estudio de LCA Consultoria, el IBJR considera que reducir el mercado clandestino en tan solo cinco puntos porcentuales podría generar aproximadamente R$ 1.000 millones adicionales al año para las arcas públicas.
“En la práctica, un impuesto del 15% sobre cada apuesta equivale a otorgar una bonificación inversa del 15% al mercado ilegal, un incentivo creado por el propio Estado que aumentaría artificialmente el atractivo de las plataformas irregulares”, afirma el director asesor y uno de los fundadores de IBJR, André Gelfi.
“Sería una recompensa para quienes no pagan impuestos y un castigo para quienes cumplen la ley. La proyección inflada del impuesto CIDE-Bets no se sustenta en ningún modelo realista de comportamiento del consumidor. Al encarecer el mercado regulado, disminuyen los ingresos y aumenta la delincuencia”, afirmó Gelfi.
Y concluyen afirmando que el IBJR “seguirá defendiendo una política fiscal equilibrada y eficaz que fortalezca el mercado regulado, proteja al consumidor y aumente los ingresos combatiendo la actividad ilegal, no castigando a quienes cumplen la ley”.