El mercado de juego online en Francia se contrae en el primer semestre

Los ingresos de las apuestas online reguladas y el iGaming en Francia cayeron un 11% hasta los 1.210 millones de euros en el primer semestre de 2022, tras los descensos interanuales en los tres verticales de producto.

Los resultados se vieron afectados negativamente por una caída del 12% en los ingresos brutos del juego de apuestas deportivas (GGR) hasta los 685 millones de euros, ya que las apuestas deportivas totales disminuyeron un 8%, hasta algo menos de 4.000 millones de euros. Esta cifra contrasta con los buenos resultados obtenidos en el periodo comparable de hace un año, debido al retraso de la Eurocopa 2020.

Las apuestas hípicas en línea también disminuyeron, con una caída del 17%, hasta los 727 millones de euros, lo que supuso un descenso del 18% en los ingresos brutos del segmento, hasta los 169 millones de euros, ya que los jugadores volvieron a los puntos de venta minoristas. Los ingresos brutos del póquer en línea cayeron un 3% con respecto a hace un año, hasta 216 millones de euros.

En todos los productos, los clientes activos descendieron un 12%, hasta 4.239.000, y los de apuestas deportivas un 20%, hasta 3.549.000. Los activos de apuestas hípicas descendieron un 5%, hasta 492.000, mientras que los de póquer en línea se redujeron un 9%, hasta 1.287.000.

Los operadores con licencia gastaron 57,2 millones de euros en marketing durante el semestre, lo que supone un descenso del 46% en comparación con el primer semestre de 2021.

Según los datos de la Autoridad Nacional del Juego (ANJ), el mercado total del juego en Francia creció un 7% hasta superar los 5.000 millones de euros en el primer semestre, tras incluir los resultados de La Française des Jeux (FDJ) y la PMU.

Los ingresos brutos de la FDJ aumentaron un 12%, hasta los 3.200 millones de euros, ya que las apuestas aumentaron un 10%, hasta superar los 10.000 millones de euros, mientras que los ingresos brutos de la PMU aumentaron un 15%, hasta los 969 millones de euros, ya que las apuestas aumentaron un 18%, hasta los 3.900 millones de euros.