Pablo Bustinduy, titular de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, ha anunciado que desde el Ministerio que dirige se va a obligar a los portales de apuestas online a mostrar un cartel advirtiendo sobre los riesgos del juego online. Para ello, se va a desarrollar el Real Decreto 958/2020, que se aprobó hace cinco años para regular las comunicaciones comerciales de las actividades de juego. Se hará a través de una resolución y dos anexos que la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) sacará a información pública en los próximos días.
Bustinduy ha hecho este anuncio en el acto «Juego Seguro», celebrado en el Ministerio de DDSS, Consumo y A2030, e impulsado por la DGOJ. Durante su intervención, el ministro ha explicado que, a través de este desarrollo normativo, se obligará a los operadores de juego online a mostrar un cartel que advierta de peligros como la ludopatía o las pérdidas económicas. Serán tres mensajes diferentes y tendrán el mismo formato que el de los mensajes que aparecen en los paquetes de tabaco para alertar de los riesgos de fumar:
● La ludopatía es un riesgo del juego.
● La probabilidad de ser un jugador que pierde dinero es del 75%.
● Las pérdidas del total de jugadores superan en 4 veces sus ganancias.
“Estos mensajes se presentarán de manera accesible”, ha dicho Bustinduy, y ha explicado que se mostrarán en los ‘displays’ de los portales de juego (es decir, en las pantallas que aparecen en sus webs o apps) y en su publicidad online (como banners o vídeos en redes). El ministro también ha remarcado que “la responsabilidad no debe caer en los usuarios y usuarias sino en las autoridades, que son las que tienen el deber democrático de que los entornos a los que accedan sean seguros”. Por ello, a través de esta iniciativa se van a sustituir los mensajes que hay actualmente, como ‘juega con responsabilidad’ o ‘juega responsablemente’, por los mensajes anteriormente citados y con un nuevo formato más visible.
Los nuevos mensajes están basados, además, en evidencias, como las que recoge el último informe sobre adicciones comportamentales y otros trastornos adictivos presentado por el Ministerio de Sanidad, y que forma parte del Plan Nacional Sobre Drogas. Según este informe, el 82,0% de las admisiones a tratamiento que hubo en España durante 2022 fueron por una adicción al juego.
A este respecto, Pablo Bustinduy ha incidido en que esta nueva medida busca “evitar que las desigualdades que ya existen se profundicen, e incluso atajarlas antes de que ocurran”, ha manifestado aludiendo a las razones estructurales del problema que supone la adicción al juego. “Las mayores aglomeraciones de casas de apuestas se producen en los barrios con una renta media más baja en sus hogares”, ha recordado el ministro, señalando que esto ocurre “porque hay operadores económicos sin escrúpulos que no tienen ningún reparo en aprovecharse de quienes tienen situaciones de mayor necesidad”. Bustinduy ha asegurado que esto mismo ocurre con el juego online, con el agravante de que “su acceso es más sencillo que el del juego presencial”.
Por otra parte, el ministro Bustinduy ha hecho mención a la Ley de Servicios de Atención a la Clientela que impulsó el Ministerio que dirige, y que actualmente está tramitándose en el Congreso, para decir que la aprobación de esta normativa servirá también para recuperar la regulación de la publicidad del juego e impedir la utilización de personas famosas para campañas publicitarias o los bonos de bienvenida que se dirigen especialmente a un público joven.
Reacciones desde Melilla
Las reacciones no se han hecho esperar. Desde el Gobierno de Melilla, su director general de innovación tecnológica, Jesús Martinez, ha hecho pública su opinión en su perfil de LinkedIn:
“Como Administración Autonómica, no podemos sino mostrar nuestro completo desacuerdo con las recientes declaraciones del ministro, en las que se acusa de manera injusta a todo un sector de “aprovecharse de las personas vulnerables”.
Conviene recordar que el sector del juego cumple escrupulosamente con una estricta normativa en materia de juego responsable, que incluye:
• Limitaciones severas en publicidad.
• Prohibición absoluta a menores de edad.
• Controles rigurosos de registros de prohibidos.
Señalar únicamente un porcentaje mínimo de casos, derivados no de la intencionalidad de los operadores privados sino de situaciones personales desgraciadas, supone actuar con mala fe y trasladar a la opinión pública una visión distorsionada.
Desde Melilla, a través de la Dirección General de Innovación Tecnológica, queremos dejar claro que siempre estaremos:
• Del lado del jugador vulnerable, protegiéndolo.
• Del jugador responsable, garantizando su derecho al ocio seguro.
• De los operadores y de la industria, que cumplen con la ley.
• Del negocio y el empleo que este sector genera en nuestro territorio.
Esto es lo que, lamentablemente, parece olvidar tanto el ministro como la Dirección General del Juego”.