El sector gallero de Puerto Rico ha apoyado esta semana el proyecto de ley de apuestas deportivas que prepara la Cámara de este territorio, pero pidió protección al Gobierno para que las galleras no cierren por una ley federal.
La industria gallera e hípica estuvo esta semana en ponencias en la tercera vista del Proyecto 2038 para habilitar las apuestas deportivas en Puerto Rico, según informó el presidente de la Comisión de Turismo y Bienestar Social de la Cámara de Representantes.
El proyecto plantea que los deportes de béisbol profesional y las ligas de Baloncesto Superior Nacional y el Voleibol Superior se presten para apuestas de público o fanáticos a través de máquinas que operarían en, por ejemplo, galleras, en el hipódromo Camarero o en casinos, señaló el autor del proyecto y presidente de la Comisión, Néstor Alonso.
Alonso explicó que dos grupos de galleros hicieron ponencias, en las que dijeron que apoyan el proyecto como una forma de compensar el fin de la industria gallera. Pero insistieron en que el Gobierno de Puerto Rico debe continuar la lucha para revertir la ley que le podría fin a la industria.
“Exigen que el gobierno siga impulsando que las galleras no cierren por la ley federal”, indicó Alonso.
El gallero José Ramón ‘Abuelo Pepito’ Rivera dijo que, para que el proyecto pueda llegar a las galleras, la industria debe continuar. “Si los gallos no continúan, nosotros no vamos a apoyar el proyecto”, afirmó Rivera, de la Asociación Sociocultural y Deportiva de Gallos Finos.
El proyecto establece que las galleras estén los primeros 10 años sin pagar las licencias por el uso de las máquinas de apuestas, dijo Alonso.
Por otro lado, la industria hípica propuso tener una exclusividad en las apuestas de caballos, comentó el Administrador Hípico, José Maymó Azize.
El administrador quiere que exista una agencia hípica en donde hagan apuestas deportivas. “Si hay máquinas en un casino, que ahí exista una agencia hípica para que se hagan las apuestas a los caballos”, enfatizó Maymón Azize.
Alonso precisó que a los jugadores se le cobrará el 6 por ciento por jugar presencialmente en máquinas, mientras que al jugar por Internet aumentará a 11,5 por ciento.
Para estar al día de lo que pasa en la industria del juego, suscríbete gratis a nuestro newsletter diario.
