Francisco Mansur, asesor especial de Brasil: «Esperamos empezar a autorizar empresas de apuestas al inicio de 2024»

José Francisco Mansur es asesor especial del Ministerio de Hacienda de Brasil y está desarrollando un papel clave en el proceso de regulación que está llevando a cabo el país en el ámbito de las apuestas deportivas. En este momento, justo cuando la primera comisión del Senado está reuniéndose para valorar los distintos aspectos de la regulación, Mansur concede a Gaming Intelligence una entrevista en exclusiva en Barcelona. El despliegue realizado por nuestro equipo en Barcelona podrá seguirse en nuestros medios y también en nuestro canal de vídeo en los próximos días. En esta entrevista exclusiva, Mansur asegura que espera que ésta sea la regulación definitiva para que Brasil pueda empezar a operar como mercado regulado el año próximo. Un gigante mercado potencial de 150 millones de consumidores.

P.- ¿En qué punto se encuentra en este momento la tramitación del proyecto de regulación del juego en Brasil?

R.- La semana pasada acabamos de aprobar un proyecto de ley de regulación de apuestas deportivas en la Cámara de Diputados de Brasil. Ahora estamos empezando los trámites en el Senado, que dispone de 45 días para valorar y votar el tema. Así que esperamos tener numerosas conversaciones con los senadores en los próximos 45 días para que nos transmitan su visión sobre el tema y conozcan las ideas del gobierno para que lleguemos democráticamente por consenso a un mejor texto para suplir la falla que ha sufrido Brasil en los últimos cinco años. Durante este tiempo, Brasil no reguló sus apuestas deportivas y por fin lo está haciendo en este momento. 

P.- ¿Cuál es la idea del Gobierno de Lula para el modelo de apuestas deportivas en Brasil?

R.- Cuando iniciamos el Gobierno, el Gobierno del presidente Lula, con el ministro Fernando Hdad (ministro de Hacienda), notó que en Brasil había un enorme mercado que ya estaba dándose, que las personas estaban apostando sin ninguna regulación del Gobierno. No hablamos ya sólo de impuestos, sino también de integridad, control de la manipulación de los resultados de las apuestas, el lavado de activos y el juego problemático. Todo eso lo hemos trabajado en una regulación, desde enero -fecha de toma de posesión del presidente Lula da Silva- hasta junio, durante seis meses. Esa regulación la presentamos al Congreso y ahora ya ha pasado al Senado. El Gobierno de Lula ve este asunto con mucha preocupación porque cada día hay millones de brasileños apostando sin regulación. Y no es justo que todos los sectores de la economía paguen sus impuestos y este sector no lo haga. 

P.- Es importante la gestión de esos impuestos.

R.- Es importante. Pero también hay otras que tenemos que cuidar. Es el caso de las personas que apuestan sin regulación; de la integridad del deporte; de la integridad de las finanzas de las apuestas y es lo que estamos haciendo en el Ministerio de Hacienda desde que tomamos posesión del Gobierno. 

P.- ¿Cuándo se espera entonces que la ley esté aprobada ya en el Senado?

R.- Esperamos que en 45 días el Senado tome su decisión y tengamos un texto final. Si el Senado cambia en algo la ley que vino de la Cámara de Diputados, entonces la ley tendrá que volver a la Cámara. Si el Senado la aprueba exactamente como está ahora, el texto ya puede ir a la sanción del presidente de la República. Si el presidente la sanciona, entonces tendremos una ley de apuestas deportivas en Brasil.

P.- Y la pregunta que todo el mundo se hace en la industria: ¿será ésta la ley definitiva que regule las apuestas deportivas en Brasil?

R.- Sí. Esperamos que para el inicio del próximo año estemos otorgando las autorizaciones a las empresas y tengamos en Brasil las empresas autorizadas para operar dentro de un mercado regulado. 

P.- Una de las quejas importantes de la industria al proyecto en que trabaja Brasil es el alto nivel de impuestos, de en torno al 30%, que el país prevé aplicar en esta regulación. ¿Qué tiene que decir el gobierno a esto?

R.- Nosotros tenemos uno de los tres mercados más grandes del mundo. Las empresas que entren en Brasil accederán a un mercado de unos 150 millones de potenciales consumidores. Estamos intentando encontrar la tributación justa para no penalizar ni tener un trato distinto a otros segmentos de mercado. Lo que puedo asegurar a los operadores es que no hay un gobierno tan abierto a escuchar, discutir y entender los problemas de todos, tanto de los operadores como de la sociedad como la necesidad del Gobierno de recaudar para invertir en carencias como salud, educación y seguridad pública como este Gobierno.