Brasil: un diputado quiere cambiar el proyecto de ley de apuestas para incluir el amaño de partidos

El diputado Felipe Carreras (PSB-PE), ponente de la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) sobre el amaño de partidos de fútbol, propone en su dictamen preliminar cambios en la legislación deportiva y en la regulación de las apuestas.

«Ha quedado claro que el fútbol brasileño (y el deporte en general) está muy expuesto a la práctica criminal de manipulación de resultados, debido al crecimiento del mercado de apuestas deportivas», afirmó Felipe Carreras. «Se trata, de hecho, de un desafío que deben afrontar varios países», comentó.

Tres jugadores brasileños han sido expulsados del fútbol mundial por la FIFA, organismo rector de este deporte, a raíz de las investigaciones de la Fiscalía del Estado de Goiás sobre partidos de la Serie B del Campeonato Brasileño. Hasta el momento, 14 personas han sido acusadas. La Policía Federal está investigando otra estafa, también de alcance nacional.

«El trabajo en curso en estos órganos se encuentra en una fase avanzada de investigación», dijo Felipe Carreras. El relator no pidió la imputación de los investigados. «El IPC no apreció indicios suficientes de autoría y materialidad de ilícitos penales que lo justifiquen», señaló en su dictamen.

Cuatro proyectos de ley

Tras nueve audiencias públicas y entrevistas con jugadores y representantes de las casas de apuestas, del gobierno y de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), el relator de la CPI ha elaborado cuatro proyectos de ley, adjuntos al informe preliminar.

«Una de las medidas legislativas se refiere a la obligación, bajo pena de responsabilidad penal, de los gestores, dirigentes o entrenadores de clubes de denunciar a las autoridades competentes la comisión del delito de corrupción deportiva cuando tengan conocimiento de ello», afirmó Felipe Carreras.

«El vacío legal existente en la actualidad crea un entorno propicio para la impunidad y la perpetuación de estas prácticas», afirmó el ponente. «Los implicados en el deporte son los primeros en saberlo, pero si no se les obliga a denunciarlo, pueden optar por guardar silencio, ya sea por miedo a represalias, por connivencia o por otras razones».

Otras dos iniciativas abordan la regulación de las apuestas deportivas. Una penaliza la conducta de quienes operan sin permiso gubernamental. La otra limita el alcance de las apuestas -que se restringirían al resultado del partido o al número de goles- y sanciona económicamente a los apostadores involucrados en fraudes.

La Cámara de Diputados está analizando la Medida Provisional 1182/23, que regula el funcionamiento de las apuestas a cuota fija, conocidas como quinielas. «El control del Estado sobre estas actividades es fundamental para la equidad de los juegos, la seguridad de los apostantes y la correcta recaudación de impuestos», dijo el ponente.

Por último, la cuarta proposición de ley presentada por Felipe Carreras establece que, en los casos de amaño de partidos, los máximos órganos de justicia deportiva previstos en la Ley General del Deporte deberán velar por que las sanciones aplicadas sean proporcionadas y acordes con el principio de igualdad.

Recomendaciones

El ponente también pide que el dictamen del IPC se envíe a la CBF, para que evalúe las recomendaciones sobre prevención y represión de la manipulación de las competiciones, y al Gobierno, para que analice la posible adhesión de Brasil a la Convención Macolin, elaborada por la comunidad europea para combatir la manipulación deportiva.

Desde 2014, el Convenio Macolin ha sido ratificado por Francia, Grecia, Islandia, Italia, Moldavia, Noruega, Portugal, Suiza y Ucrania. Otros 32 países europeos lo han firmado, además de Australia y Marruecos. Brasil participó en una reunión de ministros de deportes sobre el tema en la Copa del Mundo de 2018 en Moscú.