Una docena de personas trabaja en servicios de marketing digital en el sector del juego con la ayuda de la IA en BlueBull. Su fundador y CEO, Lucas Lebleu, está enfocado en ofrecer estos servicios a las empresas del sector del juego de España y Latinoamérica. Además, organiza un  torneo de póker solidario en Casino Admiral San Roque a beneficio de la Fundación Olivares. 

“Principalmente, trabajamos con Latinoamérica y fue algo natural, porque en mi trabajo anterior con Alea era director de desarrollo de negocios sobre todo para América Latina. Así que los clientes naturales vienen de ahí, y les llevamos la operación, hacemos marketing de adquisición, de retención y de fidelización de clientes”, afirma Lucas.

La severa regulación europea está llevando a BlueBull a buscar oportunidades de negocio en otros mercados, y esto, añade Lucas Lebleu, afecta a todo el ecosistema del juego. “Esta sobrerregulación severa no ayuda a los operadores a crecer, ni tampoco la demonización política de nuestro sector. En BlueBull tampoco es que nos enfoquemos al 100% en atraer este tipo de empresas, pero al final es nuestro área de experiencia”.

En cuanto a la evolución del marketing online en el sector del gaming, BlueBull habla abiertamente de su trabajo con la IA, del apoyo de esta tecnología en sus tareas de diseño y creatividad. “Es un apoyo en las tareas que hacemos tanto en creatividad como en estrategia. Cuando tienes claros los objetivos, puedes hacer un prompt con IA y, en cuestión de minutos, tienes armada una estrategia y eso acelera muchísimo los procesos”, asegura Lebleu. 

La clave, para Lebleu, es contrastar los resultados de la IA con la experiencia previa para evitar errores. “Yo creo que el que no haya pensado, o no esté trabajando en soluciones con ayuda de la IA para desarrollar sus procesos o, inclusive, para una plataforma de juego, ya sea de casino, de apuestas deportivas, se quedará obsoleto de aquí a un año fácilmente”, asegura. Y añade que “hay muchas plataformas que yo no veo evolucionar a la velocidad necesaria en las actuales circunstancias”. 

En cuanto a su actividad en Latinoamérica, Lucas Lebleu ve el juego en “plena ebullición” en la región. “Hay regulaciones interesantes, como la colombiana, que ha tenido un par de cambios recientes que la han complicado; la peruana va por ahí también. A mí el mercado que más me gusta es el mexicano, porque está regulado hasta cierto punto, pero con mucha flexibilidad”.

“El mercado argentino está muy mal regulado, porque se hizo por provincias y no se ponen de acuerdo. Es complicado. En cuanto al mercado brasileño, que tenía muy buena pinta en los primeros borradores de la regulación federal, se han ido haciendo cambios a medida que se fueron votando. Ninguno quedó contento, pero al sector más afectado es al que le toca lidiar con esa regulación. Al final cambiaron el tema de los impuestos. Al final se trata de recaudar de todas las formas posibles”.

“Me parece que están pensando en cobrar impuestos del año pasado ahora a las empresas en Brasil. Yo creo que los reguladores no se dan cuenta de que todas estas acciones lo que hacen es empujar al mercado negro. Por eso, América Latina tiene un mercado negro muy potente, increíble. Hay mucho dinero en la calle y si se regula de forma dura, el mismo jugador va a buscar sitios no regulados”. Estos incesantes cambios en la regulación, en opinión de Lebleu, “demonizan al sector y empujan al jugador a buscar la forma de jugar que él quiere. Yo creo que esto es como lo típico. Cuanto más te aprietan, más tratas de salir por la tangente”.

“Entonces si apretamos más y más al jugador y a las empresas y tienes que pagar mucho dinero por una licencia y al final ves que vienen los de fuera y te hacen una competencia desleal sin licencia, y ofreciendo bonos de 300%, el propio operador se termina preguntando para qué paga impuestos. En América Latina no se ha llegado a ese punto todavía”. En cuanto al mercado chileno, “por ahora da indicaciones de que será una buena regulación, pero ya veremos”.

Además de su trabajo en el ámbito digital, BlueBull tiene una vocación solidaria desde su inicio. La compañía colabora con la Fundación Olivares de apoyo a los niños con cáncer. La última iniciativa que han puesto en marcha es realizar un campeonato de póker solidario el próximo 30 de octubre en el Casino Admiral de San Roque. Según Lebleu, todos los beneficios de ese torneo irán a la Fundación Olivares. “Haremos una noche de póker temática en la noche anterior a Halloween, y estamos buscando patrocinadores, colaboradores y sobre todo jugadores. Este torneo tendrá un buy-in simbólico y esperamos conseguir muchos fondos para la Fundación Olivares”.