Esperan votar el proyecto sobre juego en el Congreso de Brasil en diciembre

El coordinador del grupo sobre el juego en el Congreso de Brasil, el diputado bahiano Bacelar (Podemos), espera que el proyecto se vote en la Cámara en la primera quincena de diciembre. Bacelar asegura que existe un compromiso por parte del presidente de la Cámara, Arthur Lira (PP), para ello.

En declaraciones al diario Bahía News, reproducidas por BNLData, Bacelar aseguró que «tenemos un compromiso con el presidente Arthur Lira de entregar la revisión del proyecto de ley para el último día de noviembre y creo que el presidente, cumpliendo las condiciones políticas, en la primera quincena de diciembre la Cámara votará este proyecto de ley».

Aprobado por la comisión especial del Marco Regulatorio de Juegos en 2016, el proyecto sigue generando una importante división de opiniones. Y, entre quienes esperan la regulación del juego en el país, la expectativa es que el proyecto de ley finalmente sea votado en la Cámara de Diputados. 

Si bien el asunto sigue siendo controvertido, según el diputado, todas las modalidades y formas de juego existentes se legalizarán si se aprueban. Para defender la legalización de los juegos de azar, Bacelar cita el potencial de ingresos para el país. Según su valoración, se impulsarán con el movimiento de unos «15.000 millones de reales brasileños, 600.000 puestos de trabajo y un aumento del turismo».

Juego ilegal en Brasil

“Sobre todo, es protección para el ciudadano. Hoy en Brasil tenemos 500 plataformas extranjeras que permiten cualquier tipo de juego, un niño que ahora ingresa a internet puede ingresar a cualquier casino siempre que use el CPF de su padre y no tenga ninguna protección. Tenemos que regular, fiscalizar y depurar el juego para darle seguridad al ciudadano”, argumenta el congresista, quien también es presidente de la Comisión de Turismo de la Cámara.

La explotación de juegos de azar está tipificada como delito desde 1941, mediante un decreto-ley firmado por el entonces presidente Getúlio Vargas. La intención del Congreso ahora es regularizar un sector que, aunque está prohibido, no para de crecer.

El presidente Jair Bolsonaro incluso declaró a la revista Veja que no apoya la legalización y, si se aprueba, vetará el proyecto de ley. El discurso de Bolsonaro es visto como una caricia a la base evangélica de sus partidarios, quienes en general se oponen a esta práctica.

Con la creación del grupo de trabajo, la Cámara espera actualizar el marco regulatorio propuesto, incluyendo varias modalidades de legalización. En el Senado, se han desarrollado propuestas específicas sobre casinos en los últimos meses, pero aún están a la espera de un informe. El actual ministro de la Casa Civil, el senador Ciro Nogueira (PP), tiene un proyecto que regula el juego de animales, el bingo, los juegos electrónicos, los casinos turísticos y otros.

Negativas a la legalización

También existe la expectativa de que el Tribunal Supremo Federal (STF) juzgue una acción para establecer si la prohibición de los juegos de azar sigue siendo válida. El proceso estaba programado para este año, pero aún no hay una previsión de juicio.

Otro desafío que enfrentan los congresistas es la negativa de instituciones como la Asociación Nacional de Auditores Tributarios de la Renta Federal (Anfip) a la legalización.

Con una posición definida, Anfip dice que «los efectos nocivos derivados del juego superan cualquier posible beneficio económico derivado de la práctica, que además de incentivar actividades ilícitas como la corrupción, la prostitución, el narcotráfico y el blanqueo de capitales, pueden ocasionar graves daños a la salud», desencadenante de enfermedades como la ludopatía, trastorno patológico compulsivo reconocido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), provocado por la adicción al juego”, dice la asociación.

También según Anfip, su defensa al movimiento Brasil Sem Azar (BSA) es clara y “registra el compromiso de promover estudios y análisis sobre el tema en alianza con la Fundación ANFIP».