El episcopado de Brasil rechaza el Proyecto de Ley que legalizaría los juegos de azar

El episcopado brasileño (CNBB), a través de su presidencia, ha emitido una nota donde muestra su perplejidad ante el Proyecto de Ley que busca aprobar la explotación de los juegos de azar.

Los obispos critican el hecho de que, durante las vacaciones, “los parlamentarios seguirán deliberando virtualmente, lo que en la práctica limita el debate, camufla las posiciones y facilita las artimañas del regimiento”. Por eso, insisten en que “ante este lamentable hecho, la CNBB reitera su posición innegociable contra la legalización de los juegos de azar en Brasil”.

Desde el episcopado repudian que el fin justifique los medios, algo que da a entender la postura del gobierno brasileño, que argumenta que “esta liberación aumentará la recaudación de impuestos, favorecerá la creación de puestos de trabajo y contribuirá a sacar a Brasil de la actual crisis económica”. 

Frente a eso, los obispos denuncian que “estos falsos argumentos no tienen en cuenta la posibilidad de asociar el juego con el blanqueo de dinero y el crimen organizado”, a lo que se une la posibilidad de que “los casinos pueden convertirse fácilmente en instrumentos para actividades delictivas que asumen la apariencia de beneficios e ingresos legítimos”.

Razones evangélicas

Basados en razones éticas y evangélicas, la presidencia de la CNBB advierte que “la ludopatía provoca daños morales, sociales y, sobre todo, familiares irreparables”, insistiendo en que “se considera una patología en el Código Internacional de Enfermedades de la Organización Mundial de la Salud”. 

De hecho, la nota señala que “el sistema altamente rentable del juego tiene su cara más perversa en la persona que sufre esta compulsión”, relatando algunas consecuencias en las personas, como el desprecio por la propia vida, “dilapidando sus bienes y los de su familia, destruyendo así a su familia”.

Además, denuncian que “la autorización de los juegos de azar no los convierte en buenos y honestos”, resaltando que “nuestro país no lo necesita”. Por ello, “la CNBB pide al Congreso Nacional que rechace este proyecto y cualquier otra iniciativa que pretenda regular el juego en Brasil”. La motivación para ello es que “un voto a favor del juego será, en la práctica, un voto de desprecio a la vida, a la familia y a sus valores fundamentales”.

Finalmente, el episcopado brasileño muestra su compromiso “a seguir de cerca este proceso y a divulgar ampliamente los nombres de los parlamentarios que decidan dejar sus huellas en esta criminal afrenta al pueblo brasileño”, algo que puede tener consecuencias negativas en este año electoral. Todo ello lo ponen en las manos de María, mostrando su disposición a trabajar por “un Brasil justo, honesto y honorable”.