Empleados de juego alegan contra el proyecto valenciano

Los empleados del juego alegan contra el proyecto valenciano para el sector. La Unión de Trabajadores de Salones de Juego (Utsaju) ha vuelto a alegar al proyecto de la ley del juego de la Comunitat Valenciana.

Además, el sindicato ha denunciado que el cierre de salones comportará «despidos masivos y una drástica reducción de la recaudación pública».

En un comunicado, los empleados de salones alegan contra el proyecto y afirman que «no tiran la toalla» en su oposición a la nueva ley. Por eso, han llevado sus propuestas a la Subdirección de juego de la Consellería de Hacienda.

El vicepresidente de Utsaju, Vicente Contreras, lamenta que «cada nuevo paso que da la administración supone un nuevo mazazo a nuestras expectativas laborales».

Y ha añadido que la administración «está haciendo todo para acabar con los salones de juego de la Comunidad Valenciana. Y, con ellos, con nuestros empleos».

Utsaju muestra así la «enorme preocupación» de los trabajadores por unas medidas que «lejos de dulcificar la normativa, imponen obstáculos a sus puestos de trabajo».

En las alegaciones, Utsaju advierte de que «tanto la ley como este decreto impugnado ponen en serio peligro el mantenimiento de los puestos de trabajo».

La cuestión de las distancias

La distancia establecida por la regulación supone, a su juicio, precarizar sus empleos. El motivo, indican, es que «van a depender de unas distancias a centros educativos que nunca serán fijas ni seguras».

Por tanto, exige que la obligación de las distancias se aplique solo a las nuevas autorizaciones.

Sobre publicidad, Utsaju cree que la Generalitat «invade» competencias al prohibir la publicidad en fachadas, ventanales o cristaleras y puertas». Añaden que la Ley General de Publicidad de 1988 no contempla estas restricciones.

Por otro lado, la Ley de las Bases del Régimen Local (1985) establece que los municipios son los que pueden regular los lugares con publicidad.