Las empresas que agrupan a la industria del juego en España han creado la Plataforma por la sostenbilidad del juego para coordinar actuaciones encaminadas a mejorar su imagen pública.
Como argumenta la Plataforma en su primer comunicado, la idea es «sumar fuerzas» bajo el concepto de juego sostenible para «aunar posturas» y poner en marcha estrategias que respondan a las presiones hacia la industria por la su exposición pública constante.
Según indica el comunicado, desde principios de 2018 el sector del juego «se está viendo sometido a una serie de presiones a las que no estamos acostumbrados». Y añade que «la exposición pública (social, periodística y política) es constante, y el mensaje que se vierte sobre nosotros totalmente negativo».
La Plataforma añade que «los intentos sectoriales de atajar la situación de desmentir todo lo anterior en muchas ocasiones se han acabado dando la vuelta, ante la dificultad que conlleva el reaccionar a acusaciones o información distorsionada de la que ya se parte como culpables».
Por eso, para «sumar fuerzas ante la excepcional circunstancia actual», aunando posturas entre subsectores, la industria se ha decidido de forma conjunta a «poner en marcha estrategias comunes para paliar esta circunstancia que nos afecta a todos».
La idea parte de «la total transversalidad, ya que pretende incorporar a representantes de todos los subsectores: hostelería, salones, bingos, casinos, apuestas y fabricantes». En esta plataforma, además, «tienen cabida empresas de diferente perfil, que se sienten con el derecho y la obligación de aportar su criterio e implicarse en revertir la situación actual».
Bajo el concepto de juego sostenible, con la coordinación y portavocía de Cristina García, los trabajos y actuaciones que se realicen «se pondrán al servicio de toda la industria y de las asociaciones de ámbito nacional y autonómicas, para que el mensaje sea único pero a la vez enriquecido desde diferentes perspectivas».
Entre sus acciones, estará el «aunar criterios, decidir actuaciones y supervisar su desarrollo, transmitirlas a poderes públicos y sociedad en general», además de «promover la coordinación intersectorial serán los pilares en los que se basarán los puntos que se lleven a cabo, con el objetivo final de la reversión de la situación actual y la mejora de nuestra imagen pública».