Codere anuncia correctivos por sus inconsistencias contables

En el informe de Gobierno Corporativo de 2019 que Codere ha presentado al mercado, concluye que las inconsistencias contables detectadas afectaron sólo a las filiales latinoamericanas, que se hicieron sin conocimiento del área corporativa en Madrid, que «fueron intencionadas» y que habrá correctivos.

En su informe corporativo, recién presentado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la cotizada española de juego Codere incide en cómo se detectaron las inconsistencias contables durante el ejercicio 2019, dentro de sus procedimientos de control interno habituales.

Según el informe, estas inconsistencias se detectaron en algunas de las filiales latinoamericanas, en concreto México, Panamá y Colombia, durante el ejercicio
2019, en concreto en el cierre del mes de agosto de 2019.

En los análisis realizados por la compañía, que indica que «han sido corroborados por las investigaciones solicitadas por el Consejo de Administración a dos firmas independientes de reconocido prestigio», se cifraron esas inconsistencias en 16,5 millones de euros en los resultados consolidados reportados antes de impuestos, a 30 de junio de 2019.

Del mismo modo, añade el Informe de Gobierno Corporativo de Codere, los análisis internos y la investigación realizada por las firmas externas han obtenido cuatro conclusiones fundamentales. La primera es que «no se ha detectado impacto adicional en la situación de liquidez del Grupo Codere, ni indicios de usos o salidas inapropiados de fondos».

La segunda, que «se trata de un incidente aislado que sólo afectó a los resultados contables de esas filiales en este ejercicio». La tercera, que «no existía involucración del Área Corporativa de España ni existen otras geografías o ejercicios anteriores afectados por inconsistencias contables».

Y, por último, la cuarta es que «estas inconsistencias fueron intencionadas, coordinadas por un reducido grupo de personas en México y realizadas mediante la modificación de ingresos y costes en los sistemas operativos y contables, sin el conocimiento de la Dirección Corporativa en Madrid».

En cuanto al control de las cuentas, el Informe de Gobierno Corporativo estima que los sistemas de control del grupo Codere «han funcionado correctamente, y gracias a ellos han sido identificadas e inmediatamente puestas en conocimiento del Comité de Auditoría y Consejo de Administración» dichas inconsistencias, para activar los mecanismos internos y externos «de remediación e investigación», en aras a asegurar la transparencia obligada de las compañías cotizadas.

A partir de esa investigación, el Consejo de Administración de Codere indica en su informe que, basándose en las conclusiones recibidas, está abordando las «decisiones correctivas pertinentes» en cuanto a organización. La finalidad es adoptar las medidas necesarias «para introducir cambios organizativos y reforzar los controles internos».

Estos cambios están encaminados a «fortalecer los sistemas operativos y mejorar la solidez de la contabilidad y presentación de informes», admite la compañía.

En lo relativo a los riesgos regulatorios, la compañía indica que los cambios normativos en ciertas jurisdicciones donde opera, como subida de impuestos al juego o la limitación de la capacidad instalada, ha obligado a Codere a establecer planes de mitigación para mejorar la eficiencia de sus operaciones «para recuperar los niveles de márgenes inicialmente previstos».

En el ámbito fiscal, el Grupo Codere ha informado a la CNMV de que ha abierto una inspección en Italia en concepto de IVA, de la que aún no se ha emitido un acta firme. Añade, además, que «los distintos litigios fiscales iniciados en años anteriores siguen sus cauces procesales».

Y, en cuanto al riesgo país, que está pasando factura de forma sensible a Codere, especialmente en Argentina, el informe indica que, en concreto, para el caso argentino, «los datos de la inflación acumulativa de tres años han superado el 100%».

Una devaluación que, además de impactar en el saldo de tesorería, ha tenido un impacto contable negativo «como consecuencia de la aplicación de la NIC29 Hiperinflación», indica el informe.

Entre los mecanismos de control, la cotizada española incluye el seguimiento de la evolución de tipo de cambio del peso argentino y el análisis de posibles estrategias de cobertura a través del uso de derivados financieros. Además, se enfoca en la maximizar la tesorería en otros países no impactados por la devaluación de su tipo de cambio.