Los latinoamericanos apuestan menos dinero, más veces y son más leales a las marcas

En un nuevo artículo de la serie sobre el perfil del jugador latinoamericano, hoy abordamos con Blanka Homor, directora de ventas de Playson, cómo se comportan los jugadores de Latinoamérica respecto al casino. Entre las conclusiones más importantes están su fidelidad y que apuestan menos cantidades, pero con más frecuencia. 

Según Homor, los jugadores ubicados en América Latina generalmente apuestan cantidades menores, pero con mayor frecuencia. Uno de los principales puntos de diferencia entre los apostadores latinoamericanos y sus homólogos europeos es también la lealtad.

“Los latinoamericanos, si están satisfechos con el producto que se les ofrece, tienden a volver al mismo casino una y otra vez”, afirma Homor. Esto se traduce, desde el punto de vista de un operador, en que las tasas de retención de jugadores son a menudo más altas en América Latina que en los mercados europeos.

Preferencias: slots y casinos

En cuanto a las preferencias, la experiencia de la directora de Ventas de Playson es que los verticales más atractivos para el jugador latinoamericano son las tragamonedas y los juegos de casino. Las generaciones más jóvenes tienden a estar más interesadas en ellos que las mayores. Y apunta que “los torneos de tragamonedas, en particular, se han vuelto mucho más populares, especialmente en territorios como Perú, México, Paraguay y Venezuela”.

Estos comportamientos están sirviendo a los desarrolladores para “crear nuevos diseños y funciones destinadas a captar la atención de los jugadores de la próxima generación”, afirma Homor. 

“Sabemos que es más probable que la demografía demande contenido para dispositivos móviles, y nuestra nueva interfaz de usuario diseñada para juegos en movimiento está en una posición ideal para cumplir con ese requisito”, asegura.

En cuanto a su demografía, Homor señala cómo durante 2020, la edad promedio de los jugadores de tragamonedas en América Latina aumentó de 20 a 45 años, y el aumento provino principalmente de los jugadores masculinos que usan un teléfono móvil. Las nuevas estadísticas también demuestran un aumento en el número de jugadoras de tragamonedas, pero ese aumento solo se aplica a los clientes de entre 20 y 30 años.

“Los usuarios más jóvenes tienden a preferir juegos que ofrecen un nivel de interacción social y compromiso, mientras que las tragamonedas con temas tradicionales generalmente funcionan mejor con personas mayores, por lo que la naturaleza del contenido en cuestión le da una idea de la demografía que podría estar disfrutando”, afirma Homor.

Impacto de la pandemia

Sobre cómo ha afectado la pandemia al comportamiento de los jugadores, la directora de Ventas de Playson asegura que la situación generada por el coronavirus “ha acelerado significativamente la tendencia hacia el comercio electrónico y el comportamiento de los jugadores también ha cambiado”.

La pausa temporal en los eventos deportivos que tuvo lugar el año pasado alentó a algunos a pasarse al sector de los casinos en línea, especialmente a las tragamonedas, señala.

Además, el cierre obligado de los casinos presenciales y tiendas de apuestas “también obligó a muchos jugadores de casinos tradicionales a moverse en línea. Como resultado, se han familiarizado de cerca con los diferentes productos que se ofrecen, aprendiendo a jugar y disfrutando de su experiencia”. 

La pregunta es si eso continuará en los próximos años. Así responde Blanka Homor: “Es probable que ese cambio en la demanda hacia las ofertas digitales continúe en los próximos años”.