Los empresarios del sector del juego advirtieron ayer al Gobierno que están dispuestos a defender sus intereses por la vía judicial si las reformas que tratará de implementar el nuevo ministro de Consumo, Alberto Garzón, vulneran la libertad de empresa.
“Si nos tenemos que defender de una forma jurídica, somos capaces de tener los mejores abogados y, de paso, los más caros”, declaró ayer José Vall, presidente de la Asociación Española de Empresarios de Salones de Juego y Recreativos (Anesar), durante el congreso de esta patronal celebrado en Madrid.
Garzón anunció el pasado domingo su interés por regular la publicidad de las casas de apuestas, tanto en televisión como en otros soportes, puesto que considera que actualmente no hay ningún tipo de limitación a estos contenidos.
«Tenemos que defender nuestro sector, nuestras empresas, nuestro patrimonio. Hemos llegado al basta ya”, añadió Vall, que advirtió de que “la gente quiere jugar y si no encuentra vías legales, lo hará por las ilegales”.
Al acto acudió, Enrique López, el consejero de Interior, Justicia y Víctimas de la Comunidad de Madrid, consejería que prepara una nueva regulación de las casas de apuestas en la región que estará lista antes de verano.
“La Comunidad de Madrid no ha declarado la guerra al juego, sino a la ludopatía”, declaró López, que reclamó colaboración al sector para “apostar por la salud pública”. Como es sabido, en España las comunidades autónomas ostentan las competencias sobre el juego presencial, mientras que el Estado las tiene sobre el juego por internet.
El consejero tendió la mano al ministro Garzón para una “colaboración leal e institucional”, aunque, en declaraciones para 20minutos tras el acto, señaló que “ahora no es momento de hablar de horarios, sino de medidas prudentes”, en referencia a las medidas propuestas por el ministro de Consumo de reducir las horas de aperturas de estos locales.
La nueva regulación incluirá multas más altas para los locales en caso de que se identifiquen menores de edad dentro y la Comunidad ha suspendido la concesión de licencias para casas de apuestas en Madrid hasta que se apruebe la nueva regulación.
