El alcalde interino de Río de Janeiro, Eduardo Cavaliere, emitió un decreto que prohíbe la concesión de licencias a establecimientos que posean o utilicen equipos de apuestas de lotería, como ha adelantado BNLData.
La medida, oficializada el pasado jueves, día 21, mediante el Decreto (Rio n.º 56640), prohíbe la concesión de licencias a establecimientos con dispositivos como tótems, terminales de apuestas, Terminales de Videolotería (VLT) y TPV Inteligentes.
La decisión se produce después de que el gobernador Cláudio Castro regulara, mediante decreto, la autorización de estos dispositivos en el estado de Río de Janeiro. El texto con las normas para la actividad se publicó en el Diario Oficial del estado el pasado martes, 19 de agosto.
La decisión se basa en la facultad constitucional del municipio para legislar en asuntos de interés local y promover la planificación territorial. La administración municipal fundamenta la medida en su facultad y deber de autorizar y supervisar las actividades económicas dentro de su territorio, según lo establecido en el Decreto de Río n.º 41.827 del 14 de junio de 2016.
Según el documento, la instalación de dichos equipos en establecimientos comerciales distorsiona la actividad autorizada originalmente. El gobierno municipal considera que esta práctica constituye un abuso de propósito y altera el impacto social, económico y urbano de los negocios.
La administración municipal destaca la necesidad de controlar la proliferación de juegos de azar y apuestas en lugares de libre acceso sin una regulación adecuada. El texto indica que la medida tiene como objetivo proteger la salud pública, prevenir la ludopatía y mantener el orden social y la seguridad urbana.
El decreto también menciona el deber constitucional de las entidades federativas de proteger a los niños, niñas y adolescentes. Esta obligación está prevista en el artículo 227 de la Constitución Federal y el Estatuto del Niño y del Adolescente, considerando que dichas prácticas pueden perjudicar el desarrollo físico, mental, moral y social de los menores.
A los establecimientos que ya posean licencia y que instalen los equipos mencionados se les revocará. La revocación se realizará conforme a lo dispuesto en la Sección I del Artículo 57 del Decreto de Río n.º 41.827, de 14 de junio de 2016, que regula el otorgamiento de licencias y la inspección de las actividades económicas en la ciudad.
Las prohibiciones no afectan las apuestas en los servicios de lotería de la Caixa Econômica Federal realizadas por sus establecimientos autorizados. Estos continuarán operando con normalidad, sin las restricciones adicionales impuestas por la nueva normativa.
El alcalde Eduardo Paes, quien se encuentra de viaje en Estados Unidos, ya había anunciado la medida en un video publicado en su perfil X. Paes calificó la decisión del gobierno estatal de «errónea» y afirmó que el uso de las máquinas no puede autorizarse sin un amplio debate público y una normativa clara.
«En la ciudad de Río, seremos cautelosos y determinaremos que, por ahora, los establecimientos comerciales seguirán sin poder emitir permisos de operación del Ayuntamiento si cuentan con máquinas de juego», declaró Paes en el video, añadiendo que el vicealcalde interino Cavaliere emitiría el decreto.
Paes también enfatizó que, en otros países, los casinos y salas de bingo operan con un enfoque en el potencial turístico y dentro de reglas bien definidas, lo cual no aplica al modelo aprobado en el estado. Prometió reunirse personalmente con el gobernador Cláudio Castro a su regreso a Río el sábado para tratar el asunto.
Según el decreto estatal, la regulación permitiría la instalación de estas máquinas en diversos establecimientos comerciales, como bares y bares deportivos. El programa que gestionaría las máquinas estaría a cargo de la Lotería del Estado de Río de Janeiro (Loterj), que gestionaría y supervisaría el juego en los municipios de Río de Janeiro.
Para explorar este mercado, las empresas necesitarían obtener una licencia del organismo estatal y pagar una subvención de R$5 millones, con una vigencia de cinco años, además de transferir el 5% de los ingresos recaudados al gobierno estatal. Se preveía que la implementación de este nuevo sistema de apuestas comenzara en 2025.
El Decreto de Río n.º 56640 entró en vigor el 21 de agosto de 2025, fecha del 461.º aniversario de la ciudad.