La industria española del juego espera que el nuevo Gobierno español acometa la reforma de la regulación del juego en diálogo con el propio sector, que lleva años reclamando normas claras, especialmente en lo relativo a la publicidad.
Otro de los puntos en que el sector considera que se deben acometer reformas es en la equiparación del juego público con el privado, atendiendo además a las recomendaciones de la Comisión Europea (CE) para este ámbito del juego.
Así, el Consejo Empresarial del Juego (Cejuego) espera que el nuevo Ejecutivo de coalición de PSOE y Unidas Podemos regule la cantidad de spots, los mensajes y los horarios de la publicidad de los juegos de azar y las apuestas. «Es algo que hemos pedido en reiteradas ocasiones a diferentes Gobiernos», recuerda.
Ante la previsión de que la estructura del nuevo Ejecutivo incluya un Ministerio de Consumo, de nueva creación, que previsiblemente asumirá el coordinador federal de Izquierda Unida (IU), Alberto Garzón, con competencias sobre juego, Cejuego ha reiterado que «continúa dispuesto a seguir dialogando con la administración como lo ha hecho hasta ahora».
«Estamos abiertos a buscar con los reguladores las distintas normas que afectan al sector para que lo que se plantee sea efectivo, y genere la seguridad jurídica que necesitamos para desarrollar nuestra actividad», han indicado a Europa Press.
Cejuego ha precisado que, hasta el momento, se desconoce qué estructura o qué funciones tendrá el nuevo Ministerio de Consumo. «La Dirección General de Ordenación del Juego, dependiente en estos momentos del Ministerio de Hacienda, no va a desaparecer; la Brigada Especial del Juego dependiente del Ministerio de Interior no va a dejar de existir, el juego presencial seguirá estando regulado por las comunidades autónomas y el juego público y ‘online’ continuará regulado por el Estado», ha manifestado.
Asimismo, la asociación, que engloba a Cirsa, Codere, Conei Corporación, Grupo DC, Egasa, Grupo Orenes, Grupo R Franco y Grupo Servimatic, ha destacado que, para ellos «lo importante en estos momentos es la disposición a dialogar que tenga el nuevo Ministerio».
Sobre las medidas que debería acometer en primer lugar, Cejuego ha vuelto a reiterar «que se regule la publicidad de todo el juego sin hacer distinciones, es decir, que afecte tanto al juego público (SELAE y ONCE) como al juego privado». «Y en concreto que se regule en cuanto a cantidad, mensajes y horarios», ha concluido.
En el mismo sentido se ha manifestado la Asociación Española de Juego Digital (JDigital), que pide «diálogo» e incluso ha mostrado su alegría por que «las fuerzas políticas del Congreso hayan alcanzado un acuerdo para la formación de Gobierno».
La Asociación ha destacado su constante diálogo fluido con todos los gobiernos y administraciones públicas, independientemente de su color político. Y esa seguirá siendo su actitud con el que ahora va a constituirse en España. Así, aseguran que, «como siempre, mantenemos la mano tendida para colaborar como industria en defensa de un mejor marco regulatorio y de una protección de los perfiles más vulnerables».
Aunque desde JDigital se señala la posición beligerante mantenida por la coalición de gobierno ante el juego en su conjunto, se han mostrado seguros «de que escucharán a la industria antes de emprender ninguna medida para regularlo».
Y, al igual que Cejuego, son partidarios de la regulación de la publicidad, «con un desarrollo legislativo equilibrado y equitativo». «Según el Plan Nacional de Drogas la prevalencia del trastorno del juego en España es del 0,3%, muy por debajo de países de nuestro entorno donde, salvo en Italia, no se ha prohibido la publicidad», ha argumentado.
«Además, y en línea con lo que recomendó la propia Comisión Europea a comienzos de año, defendemos una ley que dé el mismo tratamiento al juego estatal que al juego privado, ya que entendemos que un trato diferenciado genera una situación de competencia desleal para las empresas privadas de juego online», añade Jdigital.
Al futuro ministro le piden diálogo para explicar los mecanismos de control con los que cuenta la industria online, para «dejar constancia que la voluntad del sector es que la ludopatía en España sea de un 0%» y para atender «a los datos oficiales sobre juego problemático y para que no se genere alarmismo social innecesario».
