El Grupo Social ONCE, como miembro del Programa Iberoamericano sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, ayudará a impulsar medidas de apoyo a 90 millones de iberoamericanos con discapacidad durante la emergencia sanitaria.
En este sentido, los países miembro de este programa han impulsado una declaración conjunta en la que consideran relevante adoptar medidas para apoyar a las personas con discapacidad durante la crisis y se comprometen a colaborar en su implementación.
Entre otras medidas, los firmantes se comprometen a facilitar la información en formatos y medios accesibles; apoyar el acceso a los servicios de salud en los casos de confinamiento forzado o asegurar a los estudiantes y trabajadores discapacitados cuenten con las condiciones para mantener sus actividades en igualdad de condiciones.
También piden garantizar los servicios de primera necesidad, así como establecer servicios específicos para necesidades sobrevenidas a causa del confinamiento. Asimismo, piden que se preste especial atención a las niñas y mujeres con discapacidad, así como a los colectivos de personas con discapacidad en situaciones menos favorables.
En la declaración también reconocen la labor del personal sanitario, de seguridad, de transporte, distribución y demás colectivos, incluyendo a trabajadores y trabajadoras con discapacidad, que están prestando sus servicios profesionales indispensables durante la crisis, a quienes también instan a prestar especial atención a las personas con discapacidad desde la perspectiva de los derechos humanos.
