Coljuegos, en colaboración con la Policía Nacional, realizó operativos de control a las operaciones ilegales en las ciudades de Zipaquirá, Cali, Pereira, Barranquilla y Soledad, dando como resultado la intervención de 7 establecimientos, en los que se decomisaron 230 elementos de azar.
En la ciudad de Cali, Coljuegos intervino tres establecimientos ilegales, donde se decomisaron 24 máquinas tragamonedas, las cuales operaban sin autorización y evadían el pago de derechos de explotación por un valor de 72 millones de pesos colombianos al año.
En cuanto a Barranquilla y Soledad, el regulador intervino 2 establecimientos de los que se confiscaron 19 máquinas tragamonedas irregulares, que dejaban de tributar por derechos de explotación al año 56 millones de pesos colombianos.
Por otro lado, en Pereira, Coljuegos intervino un establecimiento, donde funcionaban 17 máquinas tragamonedas ilegales que evadían el pago de derechos de explotación por un valor de 51 millones de pesos colombianos al año.
Por último, en Zipaquirá, el regulador intervino un bingo ilegal en el que operaban 170 sillas de juego que evadían 56 millones de pesos colombianos al año en concepto de derechos de explotación.
Coljuegos iniciará el proceso administrativo sancionatorio a quienes operaban estos establecimientos y pondrá multas de 4,1 mil millones de pesos colombianos.
“En 2019, hemos retirado un total de 2.413 elementos de juegos de suerte y azar que no contaban con la autorización para operar y que evadían el pago de derechos de explotación por un valor de 4,5 mil millones de pesos colombianos”, indicó Juan Pérez Hidalgo, presidente de Coljuegos.