España va a conectar todos sus registros de autoprohibidos del juego. El Gobierno y las autonomías los unirán, según ha aprobado el Consejo de Políticas del Juego. Este órgano trabajará en esa conexión para prevenir la ludopatía.
El acuerdo alcanzado ha contado con el apoyo de todas las comunidades autónomas, a excepción del voto en contra de Cataluña y las abstenciones de País Vasco y Comunidad Valenciana.
Cuando una persona detecta su adicción al juego, una de las medidas de protección que existen en España es la inscripción en un registro de autoprohibidos, que le impide acceder a esta actividad.
Al darse de alta, la administración y las empresas impiden que entre en salas o portales online donde se puede apostar. En esta base de datos se pueden inscribir voluntariamente aquellas personas que quieren protegerse a sí mismas y a sus familias de los efectos devastadores de una acción compulsiva.
Actualmente, hay un registro estatal y, aparte, cada comunidad autónoma posee uno propio. El registro estatal impide el acceso al juego online, mientras que si una persona se inscribe en el de su comunidad, su capacidad de jugar estará restringida en las salas presenciales de esa comunidad en concreto.
Registros no conectados
A día de hoy, ambos registros no están conectados, a excepción de Castilla-La Mancha, que sí ha avanzado en la interconexión. Estas lagunas provocan vacíos e inconsistencias importantes en la protección de las personas.
Así, una persona que se haya inscrito en el registro del Ministerio de Consumo no podrá acceder a portales de juego online, que son de competencia estatal, pero sí a establecimientos físicos de juego, de competencia autonómica, salvo que su normativa lo impida.
De igual forma, una persona que se haya inscrito en el registro de su comunidad autónoma no podrá acceder a un establecimiento de juego en su región, pero sí podrá hacerlo en otra.
El objetivo del Ministerio de Consumo ahora es que la inscripción se extienda a todos los registros para potenciar la protección institucional a las personas y familias que más lo necesitan.
Convenios entre Gobierno y comunidades
La previsión es que los registros de interdicciones funcionen como una única base de datos, coordinados bajo una agenda cooperativa entre el Consumo y las comunidades autónomas, que tendrán hasta enero del 2021 para encontrar la mejor fórmula de conexión. Para que todos los registros queden interconectados, el Gobierno de España firmará convenios con las comunidades autónomas a lo largo del próximo año.
El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha afirmado que simplificar los trámites de autoprohibición «facilitará la vida a muchas familias abrumadas por el problema de la ludopatía, sobre todo a las más vulnerables».
«Ponemos por delante a las personas y garantizamos su salud y protección, simplificando las trabas burocráticas», ha señalado Garzón que añade que «personas sin dificultades de desplazamiento estarán favorecidas por la interconexión».
54.294 excluidos del juego online
El registro estatal, que no incluye los listados autonómicos y que sólo restringe el acceso al juego online, tiene 54.294 inscritos. En 2019, se inscribieron 9.143 nuevas personas, un 43% más que en 2018. El porcentaje de menores de 25 años inscritos se ha disparado en los últimos años: en 2012 representaban el 11% del total de inscritos y en 2019 ascienden al 22%.
